Advierte Estados son burocráticos, lentos y obsoletos ante la lucha contra el crimen
Alejandro Rebolledo, abogado venezolano y experto antilavado de dinero, llamó la atención sobre la amenaza que representa el crecimiento de la delincuencia en América Latina, y advirtió que “el Estado es burocrático, lento y pesado, en la lucha contra el narcotráfico y otras expresiones del crimen organizado”.
El experto señaló que “el crimen se moderniza y tiende a ser cada vez más rápido e innovador en el uso de mecanismos para penetrar en las relaciones sociales, políticas y económicas de los países, donde ejerce su poder a través de la violencia, manipulación y corrupción, que hoy es un fenómeno altamente productivo y cada vez más sofisticado”.
Rebolledo habló en esos términos al participar en la “III Conferencia Internacional de Seguridad y Defensa: Riesgos Globales 2011”, que inauguró el Presidente Leonel Fernández, en la Fundación Global Democracia y Desarrollo (FUNGLODE), en Santo Domingo, con la participación de 38 expositores de 17 países de América y Europa.
El especialista se refirió al narcotráfico afirmando que “es un negocio que no puede dejar escapar los delincuentes ya que, según las Naciones Unidas, un kilo de coca le cuesta al productor mil euros, al narco entre quince y veinte mil, a la mafia, unos cuarenta mil, y cuando llega a Madrid, a París, a Milán o a Berlín, el valor de cada kilo se ha multiplicado por cuatro. No hay producto en el mundo que genere mayor riqueza”.
El combate
Afirmó que se debe exigir un cambio de mentalidad en los políticos, en las fuerzas de seguridad, en las bases de la sociedad, jueces, fiscales del ministerio público, los entes militares y sobre todo en la cultura de los pueblos.
“La inteligencia en esta lucha es fundamental, ya que sirve para elaborar estrategias y labores de investigación. Incluso para recomendar cambios legislativos.
Mientras el crimen organizado sea un atractivo oficio y bien remunerado, mientras continúe siendo un gran botín, las mafias no cederán en sus lucrativos negocios y más cuando vemos como la globalización es imparable. Hay que darle duro a estos criminales donde más les duele que es en el bolsillo, pues de lo contrario seguirán alimentando al negocio más rentable de todos los tiempos”.
Enfatizó que “El crimen como oficio no puede limitarse sólo a la justicia penal. Las soluciones requieren instrumentos globales y no dejar zonas grises entre la legalidad y la ilegalidad por las que están estos criminales, se debe actuar de forma global y coordinada entre los países y de luchar sin tregua para cortar esos flujos de negocio que son auténticos centros de poder, de esa manera estaremos dando un paso adelante contra el crimen organizado”.