Director CNC propone estrategia para general empleos
El director del Consejo Nacional de Competitividad (CNC), Andrés van der Horst Alvarez, planteó que el país requiere desarrollar una estrategia para generar empleos formales y de calidad, como lo demanda la abierta y pujante economía de hoy.
Señaló que la estrategia para la generación de empleos debe ir más allá de la simple modificación del Código Laboral, discusión en la que se encuentran envueltos en la actualidad patronos y obreros, con el propósito de tocar asuntos formales.
Explicó que la justificación de la informalidad es como esconder la basura debajo de la alfombra, que evidencia graves fallas en el sistema y el modelo productivo, el cual no solo se compone de políticas públicas, sino también de generación de riquezas.
Van der Horst Alvarez declaró que la República Dominicana no puede seguir creciendo sobre un modelo que no genera mayores niveles de formalidad, dado que lo contrario, la informalidad, tira en contra del desarrollo de mejores políticas públicas.
Aseguró que es impostergable la adecuación del Código Laboral en función de la lógica de la dinámica global de la economía y del proceso de comercio internacional en el que se inscribe el país, y por ello hay que adecuarlo y ajustarlo a esa realidad.
Destacó que el problema de la informalidad y los bajos salarios no se resuelven con el solo hecho de asumir las citadas reformas, las cuales se vienen discutiendo sin que todavía se avizore un amplio y profundo acuerdo entre los sectores envueltos en la discusión.
El director del CNC dijo que no se puede justificar ni salarios por debajo de niveles reales de productividad, ni informalidad, puesto que si se justifica la informalidad de manera implícita se justifica la evasión, hecho que no puede legitimar bajo ninguna circunstancia.
Planteó que además de una estrategia para generar empleos formales y de calidad, la República Dominicana requiere promover aspectos normativos que incluyan una nueva y moderna forma de asignar los salarios reales, y una institucionalidad que vaya más allá de una mediadora de conflictos.
Consideró que esa institucionalidad debe constituirse en una administradora del mercado de trabajo, que como cualquier otro mercado adolece de fallas y el Estado está llamado a compensarlas y regularlas para su buen funcionamiento.
