La tormenta invernal provoca la cancelación de más de 7,500 vuelos en EE.UU.
La tormenta invernal “Pax”, que ayer viró hacia el noroeste de Estados Unidos, ha dejado a su paso por el sur y el este del país almenos una veintena de fallecidos, la mayoría a causa de accidentes de tráfico relacionados con el temporal y ha colapsado el tráfico aéreo con la cancelación de más de 7,500 vuelos.
Las cancelaciones de vuelos de ayer jueves se acumulan a las más de 8 mil registradas desde que entrara el frente frío en el país el pasado lunes, así como a los más de 2 mil retrasos que se han contabilizado en los últimos dos días.
Las incesantes tormentas de nieve y hielo han causado este invierno el número más alto de cancelaciones de vuelos en más de 25 años en Estados Unidos.
Las aerolíneas de Estados Unidos han suspendido más de 75 mil vuelos internos desde el 1 de diciembre, incluidos alrededor de 14 mil esta semana.
La cifra equivale al 5,5% de los 1.350.000 vuelos programados durante esta temporada, según cálculos de la AP basados en la información provista por el sitio especializado de internet FlightAware que da seguimientos a las llegadas y salidas de aviones.
El número y el porcentaje de cancelaciones son los más elevados desde al menos el invierno 1987-1988, cuando el Departamento de Transporte comenzó a archivar la información sobre las cancelaciones.
Además, la combinación de medidas para la reducción de costos y nuevas disposiciones del gobierno han propiciado un aumento de las posibilidades de que las aerolíneas cancelen vuelos y dejen a los pasajeros en aprietos para llegar a sus destinos.
El jueves, más de 70% de los vuelos fueron cancelados en Baltimore, Filadelfia; Washington D.C., y Charlotte, Carolina del Norte, debido a una tormenta de invierno que paralizó la mayoría del tránsito a lo largo de la costa este.
Las tormentas de hielo en este invierno han causado grandes dolores de cabeza a ciudades típicamente cálidas como Atlanta, Dallas y Houston. “Este año ha tenido un comienzo brutal para las aerolíneas y los viajeros”, dijo el director general de FlightAware, Daniel Baker.
“No solo cada tormenta ha causado decenas de miles de cancelaciones, sino que ha habido muchos temporales”, apuntó.
A febrero todavía le restan dos semanas. Para agravar las cosas, las aerolíneas han reducido los vuelos poco lucrativos y llenado de pasajeros los aviones.
Hielo en los grandes lagos
Desde el puente del rompehielos de la Guardia Costera de Estados Unidos Mackinaw, el norte del Lago Huron luce como un vasto campo cubierto de nieve con bloques de hielo grandes como peñascos, lo que representa un campo de batalla para la tripulación de esta nave en uno de los inviernos más duros de que se tenga memoria.
Ha hecho tanto frío durante tanto tiempo que los Grandes Lagos están casi completamente cubiertos de hielo por primera vez en 20 años. La última ocasión en que eso estuvo cerca de suceder fue en 1994, cuando el 94% de la superficie de los lagos se congeló.
El miércoles, el hielo cubría 87% de acuerdo con el Laboratorio de Investigación Ambiental de los Grandes Lagos con sede en Ann Arbor, Michigan, dependiente del gobierno federal.
Algunas secciones del lago se endurecen anualmente pero los científicos dicen que durante las cuatro décadas pasadas el promedio de hielo que cubre el agua ha retrocedido en 70%, quizá como efecto del cambio climático. No obstante, como ha quedado claro en esta temporada, los patrones climáticos de corto plazo pueden superar a tendencias de largo plazo.
El invierno llegó antes de lo habitual y no parece dispuesto a ceder. “El torbellino ártico bajó y el hielo sigue apareciendo”, dijo George Leshkevich, un físico que trabaja en el laboratorio federal.
El duro frío es más que una novedad ya que puede reponer los niveles de agua al limitar la evaporación y puede influir en la conservación de algunas especies de vida silvestre, por ejemplo, protegiendo los huevos de algunos peces de los depredadores.
Para las tripulaciones de la Guardia Costera el trabajo ha aumentado. En esta temporada sus horas de trabajo se han multiplicado por cuatro respecto al promedio de otros años, dijo el vocero de la agencia en los cuarteles de Cleveland Kyle Niemi.