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En España, el turismo podría no ser el “motor de la economía”

Cuando se empezó a hablar de crisis económica – afirma el servicio informativo de Hosteltur – los responsables políticos se afanaron en afirmar que el sector sería uno de los que mejor aguantarían el tirón y se convertiría en motor de la economía española. Pero parece que a estas alturas, las cifras les contradicen.
Sin embargo los últimos datos del IET (Instituto de Estudios Turísticos) indican que hasta septiembre el número de visitantes extranjeros disminuyó en comparación con el mismo periodo del año pasado y algunos expertos en economía piensan que no se le puede considerar motor económico, en estos momentos.
Adriana Espinet y Ramón Serrat, ambos expertos en economía de la consultora turística Cett Consultors, consideran que aunque en los últimos años el sector ha contribuido positivamente al crecimiento económico “representando alrededor del 10% del PIB”, su peso en la economía vendrá determinado “en la medida en que se vea afectado, no sólo el turismo nacional, sino también el internacional”.
Teniendo en cuenta que en 2007 España fue el primer destino turístico a nivel europeo “y que países como Francia y Alemania (que aportan un amplio porcentaje de los turistas provenientes del continente europeo), también se encuentran en una situación económica delicada, es difícil predecir con qué intensidad va a afectar al sector turístico”. Aún así ambos expertos prevén un crecimiento en el sector “eso sí, menor que en años anteriores”.
Por otra parte Rafael Serendeses, experto financiero del IEAF (Instituto Español de Analistas Financieros), entiende que en principio no se ven razones para pensar que el turismo vaya a ser el motor de la economía, “ahora bien, si el sector aplica las recetas oportunas y dinamismo empresarial, tiene probabilidades de salir de la crisis antes que otros”.
Según los expertos de Cett Consultors la desaceleración se va a notar más en la reducción de las estancias en los hoteles, “con lo que disminuirá el nivel de ocupación”. Como posible solución apuntan a que “a corto plazo, se podrían realizar promociones que tengan en cuenta este cambio, poniendo énfasis en la relación calidad precio y teniendo en cuenta el tipo de cliente que se quiere o se puede captar. Si nos centramos en el largo plazo, entonces cabe tener en cuenta la evolución que se espera para el sector hotelero”.
Además consideran que viendo los cambios en las tendencias, tipos de clientes, servicios, estancias, etc., “se tendrían que desarrollar planes para captar clientes explorando las necesidades que se pretenden cubrir y viendo, con los recursos que se tienen y los que deberán adquirirse, como adaptar el negocio a los nuevos cambios”.
En Cett Consultors consideran que el sector aéreo va a ser el más afectado por la desaceleración “puesto que uno de los factores de esta crisis es el incremento del precio del combustible, lo que afecta directamente a los costes de las distintas compañías”. Sin embargo, si se reduce el número de vuelos “también se reducen las estancias relacionadas con esos vuelos, por lo tanto, indirectamente, el sector hotelero también se verá afectado”.
Sin embargo también hay oportunidades para aprovechar los tiempos difíciles para mejorar, como explican Espinet y Serrat, “este sector podrías beneficiarse de la crisis si se buscan nuevas oportunidades de negocio, es decir, hemos dicho que la crisis no sólo está cambiando el nivel de consumo, sino también la manera en que se consume. Las necesidades son distintas, no sólo por el hecho de que el presupuesto pueda ser menor, sino también por los cambios sociales que una crisis implica”. Desarrollando proyectos adecuados a estos nuevos consumidores, “podría abrirse la puerta de salida o atenuación de la recesión”.

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