El Gobierno español promete bajar al turismo 4 por ciento
El turismo soñaba con salvarse de la quema de la subida del IVA. No fue así, pero confía en que el Ejecutivo cumpla, ahora sí, sus compromisos con el sector, aunque sea tarde. El sector cuenta con la promesa de rebajarle el tipo del 10% actual al 4% en los próximos tres años. “Es una pesadilla, porque parece que el turismo ha dejado de ser una prioridad en las políticas de Estado”, se queja Molas. “Es una pena que el ministro Soria esté más ocupado con los temas energéticos y del automóvil”.
El sector turístico ha asumido con una mezcla de resignación y de cabreo contenido verse finalmente salpicado por la subida del IVA. El compromiso del Partido Popular, cuando estaba aún en la oposición pero también aterrizado ya en el Gobierno, había sido rebajar al gran motor de la economía española su fiscalidad, pasando del 8% que se le aplicaba entonces a un tipo superreducido del 4%. Sin embargo, el Ejecutivo sacrificó su promesa a la cuadrutura del círculo de las cuentas públicas y desde el 1 de septiembre el turismo también sufre el alza del IVA, que ha pasado al 10%.
La medida ha supuesto un duro golpe a la rentabilidad de las empresas que ya venían padeciendo la crisis con márgenes muy ajustados. Desde el sector hotelero, pilar fundamental de la industria turística nacional, se asume que el alza del IVA supone el golpe de gracia para un 2012 que ya se preveía malo y quizá también para un 2013 para el que todo es incertidumbre. “Prevemos un invierno francamente malo. El final de este año y el principio del siguiente van a ir mal, muy mal”, augura Juan Molas, recién reelegido presidente de la patronal hotelera Cehat. “Con la actual coyuntura económica es muy difícil hacer previsiones más a largo plazo”.
Con la paciencia del que ya conoce cuáles son los tempos de la política (lleva seis años al frente de la patronal y afronta ahora su último mandato por otros cuatro), Molas no pierde la esperanza y revela que el compromiso del Gobierno sigue sobre la mesa. “El Gobierno nos ha prometido que rebajará el IVA al turismo al 4% esta misma legislatura”, desvela. Pero igual que conoce los tempos, está acostumbrado a ver cómo las promesas se las lleva el viento… o la crisis. “El deseo y el compromiso del Gobierno es bajarlo y hacerlo en cuanto sea posible. Probablemente dependa de si lo permiten Bruselas o Berlín”, ironiza.
El presidente de la patronal de los hoteleros insiste una y otra vez en que las relaciones con el Ejecutivo siguen siendo “muy buenas” a pesar del duro revés de elevar su fiscalidad. Pero aunque el discurso oficial sigue siendo el de subrayar la sintonía entre el sector y la Administración, las críticas son muchas y variadas. “Es una pesadilla, porque parece que el turismo ha dejado de ser una prioridad en las políticas de Estado”, apunta Molas, que enumera la lista de afrentas contra los intereses del sector: subida del IVA, incremento de las tasas aeroportuarias, recorte del 72% del presupuesto de promoción exterior en tres años (un 24,5% para 2013), reducción de las plazas de los viajes del Imserso, las dudas sobre la continuidad del programa Turismo Senior Europa, la ley de propiedad intelectual…
“Tenemos muy buenas relaciones con la Secretaría de Estado de Turismo y con Turespaña”, subraya el líder hotelero. “Pero lamentamos que el ministro esté más ocupado con los temas energéticos y del automóvil”, se queja. Y es que el ministro José Manuel Soria lo es de Industria, Energía y Turismo. “Nos iría mucho mejor si tuviéramos un representante exclusivamente dedicado al turismo, con peso en el Consejo de Ministros. Nos da igual que sea un ministro o un secretario de Estado depedendiente del Ministerio de Economía, que es donde se deciden las partidas presupuestarias”.
“El ministro Soria parece que dedica muchos esfuerzos a otros sectores y que al turismo dedica menos tiempo. Claramente no hemos sido un sector prioritario para el Gobierno”, explica Molas. Desde Cehat se alerta de que las subidas de impuestos y tasas al sector suponen un revés a la competitividad de España como destino turístico y un golpe definitivo a la rentabilidad de las empresas del sector.
Los hoteleros tratan de salvar los muebles en mitad de una situación que ha partido el negocio y el país en dos. La llegada de turistas internacionales está cerca de máximos históricos, lo que hace que los destinos vacacionales de costa e islas registren buenos datos de ocupación y facturación, mientras que la demanda de clientes españoles se ha derrumbado, lo que hace que el turismo urbano y de interior se encuentren en una situación crítica.
La subida del IVA ha sido un golpe definitivo a la complicada situación que el derrumbe del consumo en España ya había creado. Cuando los márgenes ya estaban realmente ajustados, las empresas se ven incapaces en la mayoría de los casos de repercutir al cliente el alza de impuestos: las reservas ya realizadas y los paquetes ya vendidos tenían el precio fijado y es inamovible, y dada la alicaída demanda, parece improbable que se pueda revisar al alza las tarifas en lo que queda de año.
Además, los grandes touroperadores internacionales no han aceptado (o solo en casos muy particulares) asumir la subida del IVA en la programación de paquetes para 2013. “Al final, el nuevo IVA se lo ha comido el hotelero a costa de seguir reduciendo rentabilidad”, apunta Molas.