Señalan posibilidades del turismo de crucero en RD
El turismo de cruceros a nivel internacional puede beneficiar a un país a través de una gran variedad de variables económicas como son el tipo de cambio, las recaudaciones fiscales, el nivel de empleo, la productividad, las externalidades, entre otras, asegura el estudio “Impacto Económico de los Cruceros en el Turismo de Santo Domingo.
De acuerdo con el estudio, presentado en el marco del II Congreso de Turismo Urbano, que se llevó a cabo el viernes en el hotel Embassy Suites by Hilton, el flujo de turistas de crucero que recibe la República Dominicana es apenas un 1.5% del total que llega al Caribe.
Para lograr una mayor participación en el mercado, el país debe trabajar en la promoción del destino enfocado en el potencial histórico del punto de desembarque, ya que la mayoría de los pasajeros que tocan el puerto no van por la riqueza histórica.
El estudio, preparado por Nassim Alemany para el Cluster Turístico de Santo Doming, estima que por cada 100,000 pasajeros adicionales que lleguen al puerto de Santo Domingo, se generarían gastos adicionales para la zona por parte de los turistas, tripulación y líneas superiores a los US$15 millones, y se crearían más de 230 empleos directos e indirectos con más de US$1 millón en salarios.
El estudio sostiene que son pocas las rutas de crucero que tienen como puerto base a algunos de los puertos del país.
El principal puerto del país en términos de volumen actualmente es el de La Romana, que recibe el 60% del tráfico marítimo.
Santo Domingo ha pasado a ser el tercero en importancia, luego de que muchas líneas dejaron de tocar este puerto por distintas razones físicas y económicas. Para la temporada 2014-2015 se espera que Santo Domingo empiece a recuperar el flujo marítimo que tenía en años anteriores, con nuevas líneas y rutas de cruceros.
Refiere que el turista de crucero gasta en promedio menos en República Dominicana que en los demás países del Caribe, y su satisfacción con el país y sus atracciones es menor comparado con el resto de la región.
“El gasto por parte del turista equivale a casi tres veces lo que gastan en conjunto los tripulantes y las líneas de crucero.
Por esa razón es tan importante incrementar el flujo de pasajeros hacia el país, posicionándolo de una mejor manera y mejorando las atracciones existentes.
Además, el fomento de las operaciones “homeport” pudiera traducirse en un aumento significativo en las recaudaciones fiscales al país, ya que estas operaciones generan una contribución cuatro veces mayor que las de tránsito.
El país – dice “Impacto Económico de los Cruceros en el Turismo de Santo Domingo” – tiene mucho campo para expandir la industria de cruceros si se utilizan los incentivos adecuados para fomentar la llegada de nuevos turistas.
En ese sentido, explica que las políticas de incentivo y de promoción que utilizan otros países contribuyen a mantener al turista gastando en el destino por más tiempo, a la vez que le ofrecen incentivos monetarios a las líneas de crucero para que permanezcan más tiempo en sus puertos y se abastezcan localmente.
“La evidencia internacional sugiere que los países que tienen estas políticas en práctica más que compensan el gasto del
incentivo en relación al beneficio marginal que obtienen.
El puerto de Santo Domingo se enfrenta a retos importantes para expandir su industria de cruceros. Un río sedimentado, una ubicación geográfica fuera de ruta y pocos incentivos para las líneas son algunas de estas trabas, asegura.