
¿Existe un plan para dañar la buena fama de República Dominicana como destino turístico?
En los últimos 6 meses he escuchado muchísimas veces la afirmación, sin sustento estadístico, que ubica en más de dos millones la cantidad de haitianos que viven legal o ilegalmente en Dominicana. Cuando me dicen esto, siempre refiero que el censo nacional del 2022 situó la población dominicana en poco más de 11 millones.
Si tenemos esa cantidad de haitianos en el país, objetivamente por cada 10 dominicanos hay dos o más ciudadanos de Haití; y sería muy notoria su presencia. Como no ocurre eso, podríamos concluir en que si por cada 10 dominicanos no vemos por doquier 2 haitianos, entonces en algunos lugares habrá 4, 5 y hasta, 6 por cada 10 locales, y en más de un rincón tendremos una presencia igual y hasta mayoritaria.
El problema existe, pero algunos exageran y tendrán sus motivos, pero son principalmente quienes tienen el combate a la presencia haitiana como su símbolo de patriotismo. Lo que no entiendo es por qué si exageran y afirman, muy convencidos, que el país está lleno de haitianos, escogen el destino turístico más importante del país para hacer protestas por esta presencia. La frontera esta al oeste y escogen el extremo este.
Alegan que en esa comunidad turística existe el Hoyo de Friusa, barriada de la que se han adueñado los haitianos y excluyen los dominicanos. Circularon un montaje fotográfico para mostrar un letrero que dice “FRIUSA ES DE HAITI” y hacerlo parecer como una campaña haitiana. Pero los comercios y negocios que existen en ese sector son de dominicanos y también funciona en la zona un cuartel de la Policía.
Además, en ese lugar que dicen han vedado a los dominicanos, en los últimos seis meses la Dirección General de Migración ha realizado 130 operativo y deportados 9,405 ciudadanos haitianos indocumentados.
Rafael Baron Duluc, Senador de La Altagracia, sugirió que quienes quieran protestar, lo hagan en la capital del país o en la frontera con Haití. No en Punta Cana ni en otros destinos turísticos, porque pueden provocar incidentes que proyecten una imagen muy negativa que aleja el turismo, la principal industria del país.
¿Existe ese riesgo? Si. Un importante diario digital turístico de España con gran presencia internacional tituló el lunes pasado: “¿Es Punta Cana un polvorín? El domingo tuvo lugar una manifestación contra la inmigración ilegal que desembocó en altercados y desórdenes, los cuales causan un daño significativo a la imagen del destino. Disturbios en el principal destino dominicano podrían ahuyentar a los turistas”.
Este diario le ha dado seguimiento al tema. En una segunda nota periodística, refiere la crisis y problemas que está creando la deportación de obreros haitianos a la actividad de construcción en Punta Cana. Nos hemos convertido en líderes del turismo en el Caribe. Eso es un importante logro, pero también debemos aprender que ese éxito nos convierte en un punto de interés, y lo que hacemos bien será noticia, pero también llamaremos la atención y seremos noticia de primera página cuando hagamos un “tollo”, como el que algunos quieren montar en Punta Cana para ganar una cuestionable notoriedad política, o quizás para cumplir “compromisos”.
He escuchado críticas a David Collado, porque estaba en Miami mientras aquí se cocinaba un sancocho para dar un golpe negativo en Punta Cana. Creo que fue una buena decisión mantener en agenda esa cita de promoción turística en Estados Unidos, nuestro principal mercado. Los anti turismo no lograron el escándalo que quisieron montar en nuestro principal producto turístico, y acertamos con una notable presencia en Miami promoviendo el país con información positiva.