Esperan 40 mil springbreakers en Caribe mexicano

Con el arribo de los primeros grupos de estudiantes canadienses se inicia la temporada de springbreakers en Cancún y la Riviera Maya, un período en el que las agencias prevén un aumento del 3 al 5% en el flujo de viajeros, mientras los prestadores de servicios estiman una cifra similar a la de los últimos años, de unos 40 mil jóvenes norteamericanos.
Aunque la visión de touroperadores como Best Day y Oasis es optimista, pues se advierte una recuperación económica y existe una percepción de seguridad con respecto a los destinos del Caribe mexicano, no creen que este segmento vuelva a alcanzar los números registrados en los noventa, cuando llegaban casi 100 mil visitantes de esta modalidad a la región.
Ello se debe a que el mercado se ha distribuido hacia otras zonas de México y el Caribe, así como en el interior de los Estados Unidos, donde se incentiva este segmento de turismo con fuertes campañas promocionales, indica un reporte del Diario La Verdad, de Quintana Roo.
Directivos turísticos de Cancún citados por esa fuente abundaron que en ese destino en particular estarán recibiendo entre 10 mil y 17 mil jóvenes durante la temporada, que cobra auge entre marzo y las primeras semanas de abril con el arribo de los estudiantes estadounidenses.
Entre los cambios reconocidos en el comportamiento más reciente de los springbreakers figura la contratación de los viajes por vía electrónica, lo que conlleva a que su duración no sea de seis días, como ocurría antes, sino que se limite en muchos casos a un fin de semana.
Sectores como el náutico indicaron que si bien este segmento no representa un ingreso fuerte en Cancún, porque su consumo es mínimo, este contribuye con el resto de la operación turística.
Por su parte, los hoteleros de la región dijeron que solo ven beneficiada su actividad en uno o dos puntos de la ocupación total del año, una cifra que si bien no representa mucho en términos económicos debe ser tomada en cuenta, pues los springbreakers de hoy pueden convertirse en los adultos que elijan el balneario como destino cuando se casen o formen familias, siempre que hayan recibido buen trato y un servicio de calidad en el Caribe mexicano.