El sector turismo de España busca mecanismos para lograr la rentabilidad
Buena parte de la industria turística española ha puesto el pie en el acelerador para ejecutar un gran número de planes encaminados a mejorar la rentabilidad empresarial durante los próximos años, a pesar del entorno de crisis económica y la contracción de la demanda interna.
Las estrategias son diversas y cada compañía está poniendo el énfasis en ciertas palancas, sostiene la revista Hosteltur en su edición de junio.
Y es que tras el incremento de la actividad turística registrado en 2011 como consecuencia de la Primavera árabe, la incertidumbre económica vuelve a marcar el sector turístico español.
A la contracción de la demanda interna se une un escenario de estancamiento de la economía en los principales mercados emisores, con la excepción de Alemania.
Como consecuencia de todo ello, las ventas se retrasan y aumenta la presión sobre los precios, lo que afecta la cuenta de resultados de las empresas.
El Foro Turístico Hosteltur del pasado 16 de mayo, que reunió cerca de 360 altos ejecutivos de la industria, trató sobre estas cuestiones y llegó a varias conclusiones para que la rentabilidad deje de ser la asignatura pendiente del turismo español.
Así, los asistentes al acto pudieron escuchar las valoraciones de Pablo Piñero, presidente de Grupo Piñero; Mariano Pérez Claver, presidente de NH Hoteles; Peter Long, CEO de TUI Travel; Gabriel Subías, consejero delegado de Viajes del grupo Barceló; Paul de Villiers, director general de Amadeus España; Joan Vila, presidente de Hotelbeds; Álvaro Middelmann, director de airberlin para España; y Walter lo Faro, director de mercados Europa Sur de Expedia.
Las estrategias son diversas y cada compañía está poniendo el énfasis en ciertas palancas: control de costes, internacionalización, especialización, segmentación, exclusividad de productos, diversificación de mercados emisores, nuevas tecnologías que ayudan a vender, mayor enfoque al cliente para desarrollar los intangibles…
No hay una receta única, sino que cada empresa –desde pymes a multinacionales- está trazando su propia hoja de ruta.
Pero en cualquier caso, la industria turística, también la pyme, deberá pensar más en clave exportadora.
“España tiene un know-how y una reputación internacional muy importante en el sector turístico. Debemos ponerlo en valor vía exportación ya que nuestro mercado natural, el español, está en retroceso, por lo que será necesario abrir más operaciones en países emergentes”, explica Jordi Schoenenberger, socio de la consultora Deloitte, responsable de consultoría en el ámbito turístico.
