El sargazo ahorraría costos a industria farmacéutica y fabricantes de espirulina
El sargazo que abunda en playas de República Dominicana y del Caribe serviría a la industria farmacéutica para disminuir costos en la elaboración de suplementos nutricionales y medicinales para tratar algunos tipos de cáncer, control del colesterol, diabetes y otras enfermedades.
Es la conclusión de una investigación de Guillermo Contreras, estudiante de licenciatura en Biotecnología del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC), que establece que la Espirulina producida con fertilizante a base de sargazo puede usarse sin riesgo para la salud humana o animal, por los bajos niveles de metal pesado que contiene.
Sugiere procesar el sargazo para utilizarlo como abono orgánico en el cultivo de Espirulina (Arthrospira platensis), cuyos componentes se usan para elaborar suplementos que fortalecen el sistema inmunológico, algunos tipos de canceres, control del colesterol, como antioxidante, tratamiento del hígado, la vista y la diabetes.
De acuerdo con el estudio, en esta década el mercado mundial de productos derivados de Espirulina alcanzará cientos de millones de dólares, lo que augura un buen futuro para los fabricantes de suplementos nutricionales derivados de microalgas.
El proceso de cultivo de la Espirulina se realiza en agua dulce con nutrientes muy costosos por el gran número de sales que se emplean, las que deben tener un mínimo de impureza para evitar la contaminación con sustancias tóxicas y metales.
Esa situación ha propiciado a los fabricantes de suplementos con esta sustancia, la búsqueda de fuentes alternativas que incluyan el uso de abonos orgánicos para obtener altos rendimientos a menor costo, indica el estudio.
Agrega, que ahora “la investigación identifica una solución rentable y sostenible ante las acumulaciones masivas de sargazo en playas del Caribe y una oportunidad de negocios para la industria farmacéutica en República Dominicana, al ser la primera vez que se comprueba la posibilidad de usar biofertilizantes a base de sargazo como nutriente para la producción de espirulina”.
La investigación consistió en cultivar espirulina durante 16 días con un biofertilizante a base de biomasa de sargazo en diferentes concentraciones (1, 5, 10 y 20%) para luego evaluar el crecimiento, contenido de pigmentos y proteínas.
Los resultados obtenidos evidenciaron que el crecimiento y los contenidos de clorofila, carotenoides y ficocianina fueron mayores cuando se utilizó 1% del biofertilizante de sargazo, las proteínas totales fueron mayores en los cultivos con 5% del biofertilizante.
“En cambio, los cultivos realizados con 10 y 20% del biofertilizante solo sobrevivieron 72 horas”, puntualizo las conclusiones de Guillermo Contreras, que tuvo la asesoría del investigador Miguel Angel Guevara.
Hasta el momento, el sargazo que aparece en las playas dominicanas se trata como desecho y los hoteles destinan cuantiosos recursos para su disposición final, porque cuando llega a la orilla, el alga se pudre y emite hedor, atrae insectos y tiñe de marrón las aguas turquesas del Caribe.
Sobre la licenciatura en Biotecnología
La carrera de licenciatura en Biotecnología del INTEC forma jóvenes profesionales para entender y acompañar el cambio, además de hacer aportes en el nuevo escenario biotecnológico del mundo y de República Dominicana.
Esta nueva carrera, que tiene una duración de tres años y medio, abre oportunidades para generar soluciones innovadoras y sustentables a las crecientes necesidades y problemas que afectan a la sociedad dominicana vinculados a la salud, alimentos, energía y el cuidado del medio ambiente y otros campos.
Los egresados adquieren los conocimientos científicos y tecnológicos adecuados para desempeñarse como especialistas, gerentes, asesores, investigadores, directores o administradores en instituciones o empresas de los sectores industriales, agrícolas, forestales, alimentarias, medio ambientales y médico farmacéutico.
