Alcalde apoya comercio sexual en calles céntricas de Sosúa; asociaciones piden intervención del Gobierno
Sosúa, Puerto Plata.- En una insólita declaración, el alcalde del municipio de Sosúa, Wilfredo Olivences, propietario de tres discotecas en el epicentro de la prostitución, defendió la prostitución en esa comunidad, durante una entrevista concedida al periódico español La Sexta, pero su posición tiene el rechazo de la Asociación de Hoteles y Restaurantes de Sosúa y Cabarete (ASHORESOCA) y la Asociación para el Desarrollo Sostenible de Sosúa (ADSS).
Para la entrevista, el alcalde citó en un restaurante al periodista Jalis de la Serna, quien le expresó a Olivences que le llamó la atención la abierta oferta de servicios sexuales: “Estamos un poco impactados. Me he recorrido Sosúa, y desde la playa, está lleno de mujeres esperando para captar clientes para ejercer la prostitución”.
La publicación señala que el alcalde respondió: “Pero no es Sosúa el único lugar donde están todas las prostitutas del mundo; en todo el mundo hay prostitución, la prostitución es parte de la cultura del mundo, es parte de la tradición. Está en España, en su país. Allá hay muchas chicas que se buscan su vida en la calle, ¿o allá en España solamente hay santas o vírgenes?, Sosúa es un pueblo encantador”.
Sin embargo, el periodista preguntó al alcalde sobre una resolución aprobada por la alcaldía de Sosúa para que la ciudad deje de ser referente de la prostitución, que ordena mudar todos los negocios, de bares y todo lo que pueda incitar a la prostitución, hacia la parte este de la calle Pedro Clisante, que sería como una especie de “Zona Rosa”, a lo cual Olivences respondió que no se ha hecho “porque hay que darles espacios a los empresarios para que puedan reubicar sus negocios”.
“Es que los negocios que hay en la calle Pedro Clisante crean fuentes de empleos, y hay cientos de padres y madres de familias, como camareros, taxistas, seguridad, conserjes y otros que dependen de sus trabajos para llevar la comida, el sustento de sus familias cada día”, informó Olivences.
Dijo que dio el ejemplo sacrificando sus negocios y sus finanzas, cerrando sus locales y alquilándolos para tiendas chinas “para que el pueblo vea que quiero hacer un esfuerzo por mejorar el estatus de Sosúa como pueblo”.
Durante la pandemia, una inspección de las autoridades sanitarias dominicanas dispuso el cierre de al menos una de las discotecas del alcalde, por saltarse los protocolos de sanidad anticovid, indica el periódico La Sexta, de España.
ASHORESOCA Y ADSS señalan que en la administración del alcalde Olivences, la situación ha empeorado. Antes, la presencia visible de las prostitutas estaba limitada mayormente a la calle Pedro Clisante, pero ya se ha extendido a otras áreas de El Batey, como se identifica la zona céntrica de la ciudad, y hasta la principal playa. Dos de los principales centros educativos de Sosúa están ubicados en esta parte de la ciudad.
Las organizaciones consideran que es inaceptable que, estando ubicados dos de los principales colegios en la zona del Batey, a través de los años las autoridades hayan permitido ese degradante espectáculo y, como el alcalde no actúa para resolver esta situación vergonzosa, piden que el Gobierno intervenga en este caso.
La Comunidad de Sosúa está indignada con las declaraciones del alcalde Wilfredo Olivences sobre turismo sexual, dicen las entidades, y lamentan que a través de los años las autoridades “hayan permitido y hasta estimulado ese degradante espectáculo; y sí, se sabe que la prostitución existe en todas partes del mundo, pero es realmente indignante que nuestro alcalde se exprese de esa manera, y abiertamente apoye esa bochornosa presencia de las trabajadoras sexuales justamente ocupando las aceras y calles del centro de la ciudad. Esto está peor que nunca”.
También, ASHORESOCA Y ADSS opinan que la prostitución que el alcalde defiende es la causante principal de que el turismo de familia, que representa el 98% del turismo mundial, haya disminuido drásticamente en la costa norte, lo cual ha afectado seriamente la actividad hotelera en la región.
Es por eso -aseguran- que a la familia dominicana ya no les interesa Sosúa para hacer turismo, por la presencia de la prostitución en todas las áreas.