Abogados dicen SIE afecta desarrollo turístico de Samaná
La Distribuidora Luz y Fuerza de Las Terrenas denunció que el superintendente de Electricidad, ingeniero Francisco Méndez, mantiene una persecución contra esa empresa, prohibiéndole atender la demanda de nuevos proyectos del sector turístico en una área donde ninguna otra compañía tiene capacidad para prestar esos servicios.
“Las actuaciones del Superintendente de Electricidad desnaturalizan el rol del órgano regulador, pues haciendo uso de sus potestades legales obstaculiza el desarrollo de una empresa en claro beneficio de otra, con lo cual, además de contradecir el objeto mismo de la Ley, va más lejos, constituyéndose en una violación flagrante a los principios establecidos por la Constitución de la República, no sólo de la libertad de empresa y la seguridad jurídica, sino sobre todo, al principio de igualdad de tratamiento consagrado en nuestra Carta Magna, en su articulo 221”, expresaron los representantes legales de Luz y Fuerza en rueda de prensa.
El licenciado Froilán Tavares Cross y la doctora Laura Acosta Lora, sostuvieron que “el ingeniero Méndez tampoco ha respetado el marco institucional creado por la ley 392-07 sobre Competitividad e Innovación Industrial ni se ha cuidado de guardar las apariencias en su descarado empeño de obstaculizar las operaciones de Luz y Fuerza, afectando también el desarrollo turístico de Samaná, para facilitarle un mercado a la entidad Progreso El Limón, que no cuenta con capacidad propia de generación, que depende de la energía subsidiada a través de EDENORTE y que ni siquiera tiene permiso de operación otorgado por una autoridad competente”.
Afirmaron que el ingeniero Méndez ha mantenido una disposición en contra de Luz y Fuerza desde el año 2008, que le impide trabajar en el área comprendida entre La Barbacoa y El Estillero, bajo el argumento de que existe “un conflicto entre dos distribuidoras que operan en la zona”.
Sin embargo, agregaron, “durante ese tiempo el funcionario se ha convertido en padrino de la compañía Progreso El Limón, propiedad del ciudadano español Manuel Pastor, a la que le ha permitido operar con entera libertad. Incluso la distribuidora Edenorte constró una línea de distribución para suministrarle energía subsidiada por el Estado”.
Señalaron que el propio ingeniero Méndez informó el pasado 27 de diciembre que justamente el día anterior la Superintendencia había publicado la petición de Progreso El Limón para la explotación de obras eléctricas en la zona, lo que significa que apenas había iniciado el largo y complejo proceso que requiere un permiso de concesión.
“Hay que apuntar además que la compañía apadrinada por el Superintendente de Electricidad, tampoco dispone de la capacidad de potencia que requieren los proyectos turísticos de la zona, aunque el ingeniero Méndez convocó a la sede central de la SIE a los desarrolladores de proyectos de las playas del Estillero y del Limón para sugerirles que colaboraran económicamente con Progreso El Limón, para que esa compañía pudiera instalar un sistema trifásico, servicio que Luz y Fuerza ya estaba en capacidad de ofrecer sin solicitarles un centavo adicional”, apuntaron los abogados en la declaración.
