Tierras raras en Pedernales, según Bernardo Vega
Por Tony Pérez
No se trata de “un cualquiera” como yo, que he pedido la reflexión serena sobre el tema; ni es enemigo de la gestión de gobierno actual.
Tiembla y se cae de espaldas cualquiera a quien le digan que a partir de enero de 2025 el Gobierno tendría información precisa sobre la hipótesis de que en Reserva Fiscal Minera Ávila en Pedernales, habría minas de Tierras Raras más grandes que en algunas regiones de China, las cuales generarían unos 60 mil millones dólares.
Hereje merecedor de la horca es quien siquiera osara introducir una espinita en el zapato de las emociones desmedidas provocadas por la información de Energía y Minas, como acaba de hacer en un artículo publicado en Acento y Hoy el reconocido historiador, economista, escritor y analista de televisión, exgobernador del Banco Central (1982-1986) Bernardo Vega.
Él tiene serias reservas sobre la viabilidad comercial de tal proyecto y advierte al gobierno presidido por Luis Abinader sobre el riesgo de cometer el mismo error del presidente Antonio Guzmán (1978-1982), a quien embaucaron y le pusieron a emitir un discurso para anunciar al país la buena nueva de hallazgo de petróleo en Charco Largo, en la sudoestana provincia Azua.
Vega, exembajador en Washington, cree el Servicio Geológico de EE. UU. ha prestado un mal servicio a los dominicanos con la información sobre Tierras Raras.
crhttps://acento.com.do/opinion/tierras-raras-en-nuestra-bauxita-9363038.html.
El hambre mundial de estos carísimos elementos vitales para la supervivencia de las nuevas tecnologías digitales (celulares, equipos médicos, armamentos, turbinas de aviones, satélites, vehículos eléctricos, molinos de vientos) ha removido los resortes del gobierno dominicano, ahora urgido de moneda dura para mantener a flote la macroeconomía, mejorar el estatus de su deuda y operar en el día a día.
Según el ministro Antonio Almonte, especialistas de la institución e ingenieros del Ejército estadounidense, trabajan sobre el terreno y han mandado muestras a los laboratorios de su país, las cuales han evidenciado resultados muy prometedores, pero que se necesita hacer perforaciones en área de la Reserva Fiscal Minera para precisar las probabilidades de explotación comercial.
Este martes, el funcionario ha informado en el televisual Hoy Mismo que se ha instalado un campamento en el área para facilitar el trabajo a los expertos.
https://mem.gob.do/wp-content/uploads/2019/04/Decreto-No.-430-18.
En su portal, el MEM asume que “las reservas fiscales son áreas geográficas instituidas por ley. El artículo 17 de la Ley Minera establece que el Poder Ejecutivo podrá declarar una reserva fiscal de una zona minera determinada, para la exploración y evaluación de yacimientos de substancias minerales para el establecimiento de explotaciones mediante contratos especiales, o por otros motivos de interés nacional, respetando derechos previamente adquiridos”.
La entrada de Bernardo Vega a escena representa una alerta importante que el Gobierno debería analizar sin prenociones. No se trata de “un cualquiera”, como yo, que he pedido la reflexión serena sobre el tema; ni es enemigo de la gestión actual.
Él, mucho antes de sus títulos y renombre nacional e internacional, laboró en la primera Alcoa Exploration Company, la minera gringa que desde los años 50 hasta el 85 del siglo XX funcionó desde Cabo Rojo (ahora en proyecto turístico) y explotó los yacimientos de bauxita y caliza en el perímetro donde el presidente Danilo Medina decretó la Reserva Fiscal Minera en vista de la conjetura de que abundan los llamados elementos de la tabla periódica.
Ha puntualizado que lo de Tierras Raras no es tan nuevo como se presenta. Ha enfatizado que todas las bauxitas tienen esos elementos. Pero también ha enfatizado que, hasta ahora, ningún país ha logrado separarlos con éxito comercial, pese a intentos de hace más de una década.
En lo que el hacha va y viene y corre el discurso del mar de dólares que nos hará “ricos” a todos, comenzando por los pedernalenses, mis inquietudes siguen.
Si el Gobierno avanza en un proyecto de desarrollo turístico sostenible desde Cabo Rojo para aprovechar las playas, toda la rica biodiversidad de los parques nacionales Sierra de Baoruco y Jaragua y la misma naturaleza de las cuatro provincias de la Región Enriquillo la más empobrecida de RD…
Si hay promesas de cero dióxido de carbono, cero plástico, cero ruido y celoso cuido del medioambiente…
Si la explotación de la bauxita fue parada en seco en la anterior gestión de gobierno y el muelle construido por Alcoa a mediados de los años 50 para las exportaciones de los minerales está en proceso de readecuación y ya tiene pinta de terminal turística con registro de dos cruceros amarrados en su espigón…
Si la Reserva Fiscal Minera (bauxita con Tierras Raras) está en el parque nacional Sierra de Baoruco, o en su costado…
Si el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, tras protestas de ambientalistas, ha frenado sin presentar alternativas un proyecto turístico promovido por empresarios oficialistas en playa Bucanyé, municipio Pedernales, pese a estar ubicada en la más flexible de las áreas protegidas. Según la Ley 202 de 2002, artículo 13 y 14, Bucanyé encaja en la subcategoría Área Nacional de Recreo, consignada en la categoría VI (Paisajes Protegidos)…
Si las minas abrazan el tanque de agua potable recién construido para abastecer el complejo de hoteles en Cabo Rojo…
Si las autoridades tienen los hoyos de las minas explotadas como un atractivo turístico, igual que a Aceitillar, Pelempito y demás…
Ante la tentación del señor dólar, ¿cómo resolverían el dilema turismo sostenible-explotación de Tierras Raras? ¿Qué impacto tendría una explotación así en el medioambiente y la salud de los pedernalenses?