Plantean que la conservación de las áreas protegidas es un deber de las autoridades
La conservación de los parques Jaragua y Sierra de Bahoruco supone el respeto a la Constitución y a las leyes ambientales, por lo que es un deber de las autoridades, planteó Yvonne Arias, del Grupo Jaragua, en el Segundo Congreso de Fotoguardianes de la Naturaleza realizado para celebrar el Día Mundial del Medioambiente.
Esta actividad fue organizada por la Fundación Imagen 83, con el apoyo de la Fundación Propagas, con el lema “Rescatando Nuestra Biodiversidad”. Se celebró a casa llena en el Salón Empresarial de la Asociación de Industrias de la República Dominicana.
Al plantear la realidad de ambas zonas protegidas la señora Arias destacó que las autoridades tienen que asumir en ambos parques la recuperación de las áreas sustraídas, y detener la agricultura, y sugirió como opción considerar la gobernanza, a través del comanejo, y mejorar las condiciones del personal, como acciones imprescindibles para una gestión eficaz.
Además, dijo Yvonne Arias, las autoridades tienen la obligación de fiscalizar el desarrollo turístico en áreas frágiles, controlar los incendios y aprobar y poner en práctica la Estrategia Nacional de Prevención y Manejo de Incendios Forestales. Jaragua y Sierra de Bahoruco, señaló. Ambas áreas son de gran riqueza y singularidad, zona núcleo de la Reserva de Biosfera, declarada en esa región.
Las palabras iniciales del Segundo Congreso de Fotoguardianes de la Naturaleza, estuvieron a cargo de la señora Piragua Bonetti, mentora de la Fundación Propagas. El encuentro se dedicó a la memoria de Simón Guerrero, reconocido defensor de la biodiversidad. Destacados biólogos expertos en biodiversidad y fotógrafos de naturaleza de larga trayectoria participaron en la actividad.
Situación de los corales
Rubén Torres, en una exposición sobre la situación de los corales en el país, relató que desde el 2015, cada dos años, ha realizado “investigaciones exhaustivas para evaluar la salud y los cambios en los arrecifes de coral en el país”.
Estos estudios, explicó, han revelado tendencias alarmantes de blanqueamiento y degradación debido a factores como el cambio climático y la actividad humana.
“Sin embargo -afirmó- también se han identificado áreas de resiliencia y recuperación”, y además se realizan notables esfuerzos de colaboración con organizaciones locales e internacionales para mitigar los impactos negativos y promover prácticas sostenibles en la región.
Recuperación de Valle Nuevo
Andrés Ferrer refirió la situación de Valle Nuevo, el segundo mayor parque terrestre, cuyos extensos bosques y sistemas acuáticos lo convierten en el mayor productor hídrico del Caribe Insular.
Advirtió que su conservación enfrenta amenazas que causan impactos considerables cuyos responsables “compiten en poder e influencia con los débiles sistemas coercitivos y judiciales”.
Ferrer planteó que la agricultura extensiva en esa zona usa petroquímicos en sus territorios Sur, Este y Oeste y causa arrastre de tóxicos hacia el mar, y afecta suelos agrícolas, pastizales, embalses y acueductos; y el tráfico de Ébano Verde diezma sus mayores bosques primarios, menoscabando su capacidad para mitigar el calentamiento global.
