Experto advierte sobre el alto costo económico y humano de las deficiencias del tráfico en RD
Los accidentes y deficiencias de sistema de tráfico representan un alto coste económico, estimado en el 2% del producto interno bruto (PIB), y son incidencias que siempre debe conceptualizarse como prevenibles y evitables, consideró el experto español Francisco Alonso, invitado a ofrecer una conferencia sobre el tema del transporte terrestre; calificó como inaceptable la mortalidad en accidentes y propuso crear un plan de transporte turístico.
Por ejemplo, los tapones, dijo, suponen una gran pérdida de tiempo a la hora de desplazarse, lo cual, entre otras cosas, tiene repercusión en la productividad con afecciones directas a la salud física por la contaminación acústica y del aire, e incluso producen alteraciones psicológicas que van desde el aumento del estrés a la agresividad, suponiendo todo ello también un alto coste económico.
Alonso, director del Instituto Universitario en Tráfico y Seguridad Vial de la Universidad de Valencia, ofreció la conferencia “Movilidad y Seguridad Vial en el Sector Turístico Dominicano: Situación y Oportunidades”. Fue invitado a disertar en la “Cátedra Magistral de Turismo Frank R. Rainieri” de la Universidad Central del Este, en Punta Cana. La conferencia la patrocinan la UCE, el Grupo Puntacana y la Universidad de Valencia.
Previo a la conferencia, el experto invitado realizó durante varios días una jornada de observación en la región y una ronda de encuentros con autoridades y líderes del municipio de Higüey y el Distrito Municipal Verón-Punta Cana.
Adicionalmente, y no como algo secundario, afirmó, la mejora de la movilidad contribuye a reducir las emisiones, y por lo tanto a una mejor calidad del medio ambiente, la reducción del calentamiento global y, consecuentemente, de la salud de las personas.
Analizó que los accidentes de tránsito se producen por interacción de diversas casusas, pero sobre todo por el factor humano; son provocados por distintos factores de riesgo como son las distracciones, el alcohol, las drogas, etc.; los sufren mayormente los “grupos de riesgo” y los “usuarios vulnerables”, por los que hay que atenderlos especialmente
Alonso afirmó que la seguridad vial, como el transporte y la movilidad es una ciencia interdisciplinar, que tiene sus evidencias, que hay que conocer y aplicar para poder tener éxito en su mejora.
La experiencia en España, relató, desde el año 1989 a la actualidad, nos muestra que es posible reducir las cifras de muertos y heridos por accidentes de tránsito, y mejorar la movilidad reduciendo los tiempos de desplazamiento, con todas las ventajas que ello supone de salvar vidas y ahorro de dinero para el Estado y para sus ciudadanos.
La realidad dominicana
Alonso realizó un diagnóstico de la situación de la movilidad y la seguridad vial en la República Dominicana, calificando a los niveles de mortalidad como “inaceptables”, resultados que atribuye a la deficiencia de concienciación y educación de los ciudadanos.
También, a la deficiencia en los datos para elaborar políticas efectivas, impidiendo una correcta evaluación de las medidas y contramedidas que se ponen en marcha.
Consideró que todavía queda mucho desarrollo legislativo por realizar, a pesar de que se ha adelantado bastante con la aprobación de la Ley 63-17 de Movilidad, Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial, y muchos de sus Reglamentos y Normativas Técnicas derivadas.
Alonso también refirió la existencia de un déficit en el conocimiento de los técnicos que tienen que aplicar las medidas; la falta de supervisión y control; ausencia de un verdadero régimen de consecuencias; la casi inexistente planificación urbana, vialidad y gestión del tránsito; deficiencia en el transporte público e intermodal; falta de promoción de los sistemas blandos de transporte, y carencia de sistemas inteligentes de transporte
Sobre Punta Cana, dijo que constató que se observan muchos desplazamientos, y se acumulan muchas incidencias y accidentes, que van en aumento, dificultándose cada vez más el desplazamiento por razón del incremento de la actividad turística.
Alonso advirtió que por la incidencia negativa que esto pueda tener sobre los turistas, y la actividad económica que se deriva, se hace necesario intervenir con cierta urgencia y mayor eficacia, para mejorar la calidad de vida de turistas, trabajadores y ciudadanos en general; permitiendo un desarrollo sostenible y garantizando de esta importante fuente de ingresos para el presente y el futuro
Plan de transporte turístico
El profesor Alonso realizó un análisis de las oportunidades de mejoras especialmente enfocadas en el Distrito Municipal Turístico Verón-Punta Cana y en Higüey, su municipio cabecero. Propuso una serie de medidas y contramedidas concretas, y dijo que por los resultados de las reuniones que mantuvo previo a la conferencia con algunos actores importantes de la región, entiende contarían con un gran respaldo.
Lo primero, comentó, que ya se ha iniciado en cierto grado, es promover un pacto de todos los sectores involucrados, a partir de un compromiso que sume al sector privado, al sector público y la sociedad civil.
Propuso comenzar con un Plan de Transporte Turístico, que incluya todos los aspectos de movilidad, transporte terrestre, tránsito y seguridad vial, con especial atención al desarrollo urbano, a las distintas infraestructuras necesarias, que tenga una base científica y por lo tanto esté fundamentado en datos, así como que consecuentemente sea susceptible de ser evaluado.
Alonso exhortó al Grupo Punta Cana, en especial a través de su Fundación, a liderar el apoyo de todas esas acciones, en base a la responsabilidad social corporativa de la que siempre ha hecho gala, para preservar el medio ambiente, y como no, de aquellos que viven en el mismo.