Haití inicio su proyecto del Masacre sin informar a RD, que reaccionó pidiendo información y diálogo
Desde la pasada semana he escuchado o leído opiniones críticas sobre la gestión realizada por la Presidencia de la República y el Ministerio de Relaciones Exteriores del diferendo con el vecino Haití por la construcción de un canal para desviar las agua del río Dajabón o Masacre al territorio haitiano. He vuelto a leer la carta de julio del 2021 en el que expone la posición dominicana a las autoridades haitianas.
Resumo los puntos esenciales, convencido de que se critica sin leer el documento, quizás por extenso.
- El río Dajabón, nace en RD y en algunos tramos sirve de límite entre ambos Estados. El artículo 10 del Tratado de Paz y Amistad de 1929, prohíbe las obras que puedan cambiar la corriente del río, aunque ambos Estados sí tienen derecho a usarlo “de manera justa y equitativa, dentro de los límites de sus territorios” para “fines agrícolas e industriales”.
- El gobierno haitiano nunca ha comunicado oficialmente al dominicano el inicio de la construcción del canal, ni aportado documentos para evaluar su impacto ambiental.
- El 27 de mayo del 2021, de manera informal, en la reunión de la Comisión Mixta Bilateral Dominico-Haitiana, un funcionario haitiano entregó un resumen de cinco páginas sobre el proyecto. Indica que la construcción inició en el 2018, no es un canal de riego, y busca desviar parte del caudal del río.
- Era obligación del gobierno haitiano entregar los estudios técnicos y de impacto ambiental para verificar su alcance y consecuencias, las medidas de mitigación de riesgos y otros aspectos técnicos. Expertos han determinado, con la información disponible, que dicha obra implicaría un serio peligro de inundación en la época de lluvias para Dajabón, incluyendo la planta de Codevi que emplea 14,000 haitianos y 1,000 dominicanos.
- Existen 4 tomas de agua en territorio dominicano aguas abajo de donde se quiere desviar el río, la última del año 2000. Irrigan 14 mil tareas en RD y 10 mil en Haití, por un acuerdo de convivencia de los productores de ambos países. Se afectarían los medios de vida de estas comunidades que suman 391 productores.
- Para el gobierno dominicano es una cuestión de principio que el diferendo entre nuestros Estados se dilucide con miras a fortalecer una relación de buena vecindad, mutuamente beneficiosa y siempre dentro del marco de nuestras normas nacionales, los tratados bilaterales, el Derecho Internacional Público, así como de la jurisprudencia internacional sobre dicha materia.
- El río Dajabón nace en territorio dominicano, y en algunos tramos sirve de límite entre ambos Estados. De acuerdo con el artículo 10 del Tratado de Paz y Amistad, están prohibidas las obras susceptibles de mudar la corriente del río, aunque ambos Estados tienen derecho a usar este río “de manera equitativa” dentro de los límites de sus territorios para fines agrícolas e industriales.
- La posición del gobierno dominicano es que el gobierno haitiano detenga inmediatamente la construcción del canal e inicie un diálogo con nuestro gobierno para explorar otras opciones para el aprovechamiento de recursos hídricos alternativos, que beneficien ambos países.
Este breve resumen de la extensa carta del ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez en la que expone a su homologo haitiano la posición dominicana sobre la construcción del canal, es preciso y expone los sólidos argumentos que sustentan la posición dominicana, y expresa una definida actitud superar la situación mediante el dialogo.