¡No solo Pedernales!, plan “Mi Frontera RD” quiere revertir atraso en las 7 provincias fronterizas
SANT7O DOMINGO.- El Gobierno dominicano ha diseñado y desarrolla el plan “Mi Frontera”, una Estrategia de Desarrollo para la Zona Fronteriza orientada al desarrollo de las 7 provincias de la región y basada en las demandas fundamentales de la población.
El objetivo es revertir la situación de vulnerabilidad de los habitantes de las siete provincias fronterizas con Haití, que muestra que la mirada del gobierno a la región tiene un enfoque integral que no se detiene en el proyecto turístico Pedernales-Cabo Rojo, ya puesto en marcha como una prioridad para el desarrollo del lado sur de la zona.
La propuesta fue presentada por Erick Dorrejo, director de la Dirección de Planificación y Desarrollo de la zona Fronteriza, del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPyD), quien aseguró es una herramienta del gobierno con una visión común para todos organismos estatales para orientar los capitales privados a invertirse.
El plan constituye un soporte para la aplicación de la Ley No. 12-21, de promoción del desarrollo fronterizo, que sustituyó a la Ley 28-01, la que no logró generar las inversiones y los empleos necesarios para transformar la realidad de las provincias de Dajabón, Monte Cristi, Elias Piñas, Santiago Rodríguez, Bahoruco, Independencia y Pedernales, indica el documento que contiene el plan.
La nueva estrategia -explica Dorrejo- contempla dar mayor importancia a la coherencia y coordinación de las políticas públicas para el desarrollo de la zona, mediante iniciativas integrales con articulación entre las instituciones para aumentar la eficacia de las políticas y los recursos invertidos, dirigidos a solucionar los problemas prioritarios para que impacten y mejoren la calidad de vida de la gente.
Mi Frontera RD, agregó el funcionario, tiene como objetivo -además- definir e implementar políticas y acciones prioritarias que tiendan a superar las restricciones más limitantes de mediano y largo plazo, y donde se evidencian brechas territoriales con respecto al resto del país.
En ese sentido, la estrategia identifica 14 brechas estructurales para el desarrollo de la zona fronteriza: la institucional, educación, salud, pobreza, acceso a servicios, productividad, acceso a financiamiento, capital humano, conectividad, energía, agua, conectividad digital, ambiente y riesgo.
Para aplicar la nueva estrategia en la zona fronteriza, además, se identificaron cinco dimensiones en las cuales se desarrollará, a saber: la institucional, social, productiva, infraestructura y ambiente, e incluirá el estudio de temas transversales como la cultura y economía naranja, equidad de género, derechos humanos y seguridad para el desarrollo.
Habrá también -dijo Dorrejo- una planificación de la zona fronteriza que potenciará el aumento de la productividad en función de las condiciones del territorio, con dos herramientas, denominadas Subregionalizacion Económica Territorial (SET) y los Territorios Productivos Funcionales con las cuales se persigue aumentar la producción social y optimizar las condiciones de vida.
La nueva visión de desarrollo para la zona fronteriza plantea, en función de las brechas estructurales identificada, el objetivo de alcanzarla aplicando un plan de acción con programas a desarrollar en las cinco dimensiones identificadas.
“Los proyectos y programas definidos para cerrar las brechas identificadas, serán ejecutados por asociaciones sin fine de lucro y el sector privado, con fondos provenientes del presupuesto nacional, la cooperación internacional y fuentes de financiamiento privado”, indicó finalmente Dorrejo.
Situación social de las provincias
Para elaborar la nueva estrategia de desarrollo de la frontera se tomó en cuenta la despoblación de las provincias causada, entre otros factores, por la precariedad de los servicios básicos y la falta de oportunidades para la gente, necesidades básicas insatisfechas, bajos niveles de desarrollo humano y mala calidad de vida.
Realidad Socioeconómica
En ese sentido se encontró que en la zona fronteriza existen con nivel socioeconómico bajo y muy bajo, Montecristi que registra 63%, Dajabón 54%, Santiago Rodríguez 44%, Elías Piña 79%, Bahoruco 74%, Independencia 72% y Pedernales 71%.
Además, en Montecristi existe un 55% de hogares sin acceso al agua, lo que en Dajabón es de 43%, en Santiago Rodríguez 31%, Elías Piña 82%, en Bahoruco 74%, en Independencia 72% y en Pedernales 71%. Mientras que con hogares sin acceso a energía eléctrica en Montecristi es de 8%, en Dajabón 9%, en Santiago Rodriguez 4%, en Elías Piña 21%, en Bahoruco es de 7%, en Independencia 9% y en Pedernales es de 17%, el más alto en este indicador.
Entre los hogares que utilizan carbón o leña para cocer sus alimentos figuran Montecristi con 20%, Dajabón 22%, Santiago Rodriguez, 16%, Elías Piña 42%, Bahoruco con 31%, Independencia 29% y Pedernales 32%.
Al comparar el factor de nivel económico bajo y muy bajo, en la zona fronteriza el promedio es de 65%, contra un 36% en el nivel nacional; en hogar sin acceso al agua, en la frontera es de 63% y 46% en el nivel nacional; En tanto que con hogares sin acceso a energía eléctrica en la zona fronteriza hay 10% y un 2% a nivel nacional; y por último, los hogares que cocinan a carbón y leña en la frontera es de 26% y un 6% a nivel nacional.