¿Cuál es el mejor alojamiento cuando vas a viajar en Semana Santa 3/4?

La Semana Santa ya está aquí. Durante este periodo, miles de dominicanos deciden irse de vacaciones y disfrutar de unas jornadas de descanso 

Existen diferentes alternativas de alojamiento que van desde los clásicos hoteles, pasando los apartamentos de alquiler y cabañas, entre otros.

Lo que está claro es que como turistas cada vez más buscamos experiencias auténticas e inusuales, y si nos permiten mimetizarse con el entorno, mucho mejor. Esto ha provocado un creciente interés por los alojamientos alternativos que hasta hace poco no eran nada tradicionales.

Una vez más entran en juego factores como quiénes conforman el grupo de viaje, el tiempo de estadía, la cercanía de los puntos de interés, etc. Por eso, lo primero de todo, te sugerimos que investigues un poco sobre las distintas alternativas en páginas dedicadas a revisiones de alojamiento. Los comentarios sobre las experiencias de otros viajeros son de mucha utilidad y casi determinantes a la hora de decidirse.

Por mucho que dediques tus días y algunas noches a descubrir una ciudad o paisaje o a tirarte en la playa para tomar sol, si al volver no descansas bien o no te encuentras cómodo, el ansiado relax se irá a pique. Así que piensa muy bien si tu opción para Semana Santa será un hotel o propiedad de alquiler a través de Airbnb o similares, y calibra los pros y los contras.

– Apartamentos y aparthoteles, una alternativa que se afianza. Esta opción vacacional es de las que más sigue creciendo en el país. En los primeros te deberás ocupar de alimentación y limpieza. En los segundos te ofrecerán el desayuno y posiblemente la limpieza.

– Los resorts, para los que buscan servicios más completos, son los más demandados en las zonas de playa, especialmente en la región Este. Disponen de un régimen todo incluido así que no tienes que preocuparte en la alimentación durante tu estancia.

– Las casas rurales en zonas de montaña en Jarabacoa y Constanza, los campings, sobre todo en destinos vacacionales como Bahía de las Águilas; y las villasen La Romana también se consolidan como opción alternativa.

– Airbnb es una opción cada vez más demandada. Según la plataforma de alojamientos, en 2021 sus ingresos crecieron un 25% y en el último trimestre del año superó en ganancias al mismo periodo de 2019, con un beneficio de 55 millones de dólares. ¿Qué es lo más importante que debes tener en cuenta si usas esta plataforma?

 Primero la valoración que los huéspedes hacen del anfitrión. Segundo, que tu búsqueda de inmueble se ajuste a tus necesidades. Por eso te recomendamos que establezcas tus propios filtros. Bien por servicios, bien por prestaciones (por ejemplo, que acepten o no a mascotas). Así será mucho más sencillo elegir tu alojamiento ideal.

Pros y contras

Ponte en situación: alcanzas tu destino tras horas en la carretera. Llegas cansado, acarreando pesadas maletas y bajo un sol de justicia. Aún te queda encontrar el hotel que has reservado (normalmente, bien indicado con señales; además, es un punto de referencia que los locales conocen) o el apartamento por el que has optado (ve abriendo el GPS porque la calle en la que se halla es recóndita y nadie sabe decirte por dónde ir). 

A no ser que hayas tomado transporte colectivo, aún te queda aparcar cómodamente en el garaje del hotel o bien dar vueltas alrededor de tu objetivo hasta que veas (puede que una hora después) un hueco en el que parquear el vehículo. Recuerda que en los destinos vacacionales se suelen formar importantes tapones y congestiones de tránsito.

Todavía te queda un paso: registrarte en el hotel o esperar al dueño del apartamento para que te dé las llaves, te haga un tour por la casa y te indique dónde suele guardar los enseres para hacer la limpieza, cómo se enciende y se apaga el aire acondicionado (o el ventilador en el peor de las casos) y qué hacer cuando no baja ni sube esa persiana.

Para la salida….¿Te has quedado en un apartamento? Saca los productos de limpieza y deja todo como te lo encontraste. Llama al propietario, queda con él, explícale que no funcionaba correctamente el sumidero de la ducha,. Devuélvele las llaves y hasta luego. 

En fin, minucias. Pero ahora calcula el tiempo que has empleado en abandonarte finalmente en la cama del hotel y el que te ha llevado hasta darte tu primera ducha en el apartamento. Todo depende de ti.