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Escarrer afirma hoteles españoles mantienen ocupación en 60%

“Afortunadamente, el mercado doméstico (clientes españoles) se está comportando bastante bien, y las ventas a través de Melia.com siguen una progresión razonable, con niveles de ocupación cercanos al 50 o el 60% en los resorts españoles”, afirmó Gabriel Escarrer, CEO de Meliá Hotels International en una entrevista concedida a Hosteltur.

Al referirse a la prohibición del mercado británico de colocar a España dentro de los destinos no seguros, aseguró que  “La caída del mercado británico es una noticia terrible para el sector turístico español en general, y en particular para muchos destinos que son, casi “estructuralmente” británicos. Solo en agosto el año 2019 nos visitaron dos millones de británicos” dijo.  

Señaló, además, que “ Como hemos estimado desde Exceltur, el impacto podría ser enorme para una industria y unos destinos ya muy afectados, y muy transversal, porque hay zonas y Comunidades con un PIB altamente dependiente del turismo, como Canarias o Baleares, donde este sector representa directamente más de 35% de la producción”.

Dijo que la repercusión de esta medida será por tanto más acusada en aquellos destinos más expuestos a cliente británico y/o a la turoperación de ese país, como es el caso de las Islas Baleares y la Costa Blanca.

Sobre la cuarentena británica señaló que desde la sociedad, el sector británico de los viajes, y el Gobierno de España se están haciendo los esfuerzos conducentes a que el Ejecutivo británico reconsidere una decisión “que ha sido indudablemente precipitada y creemos que desproporcionada, y tenemos confianza en que el sentido común triunfará y podremos conciliar la razón sanitaria con la económica y salvar algo de este atípico verano”.

Sobre Meliá

Al iniciar la cuarentena desde su empresa se estableció un plan de contingencia donde señala que al principio de la pandemia se llamó “de emergencia” y ahora es un “plan de resiliencia”, el que se ejecuta con 6 ejes claros: la seguridad y salud de clientes, empleados y proveedores, el mantenimiento de la liquidez, la salvaguarda –al máximo posible- del empleo y el talento de la compañía, el mantenimiento o continuidad del negocio, acelerar la digitalización, y repensar la estrategia y la empresa para “el día después”.

“Hemos contenido los peores embates de la crisis y mantenemos la liquidez y las condiciones para resistir a medio plazo, y en la actualidad nos preparamos para salir fortalecidos, adaptando nuestro Plan Estratégico hasta 2022”, afirmó Escarrer.

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