Países se comprometen recorte de emisiones de efecto invernadero
Casi 70 países se han comprometido durante la cumbre del clima organizada por Naciones Unidas en Nueva York a revisar sus planes de recorte de emisiones de gases de efecto invernadero para poder cumplir con los objetivos del Acuerdo de París.
Este pacto establece que todos los Estados deben reducir esas emisiones que sobrecalientan el planeta para cumplir un objetivo común: que el incremento de la temperatura (que juzga irreversible) se quede por debajo de los dos grados centígrados con respecto a los niveles preindustriales y si es posible por debajo de 1,5. Pero, como ha advertido de nuevo la ONU, el planeta está ya en un aumento de un grado, y los planes de recorte de los Estados son insuficientes: llevarán a un incremento de más de tres grados a finales de siglo. Naciones Unidas calcula que, para cumplir la meta de 1,5 grados, se necesita que los esfuerzos aumenten entre tres y cinco veces.
Por eso se requiere que los países se comprometan a revisar ya sus planes que establecen las medidas de recorte que se deben tomar durante la próxima década. El compromiso de esos 70 países, sin embargo, no resultará suficiente, ya que no figuran tres de los cuatro principales contaminadores: China, EE UU y la India.
“Esta no es una cumbre para venir a hablar, a negociar; no se negocia con la naturaleza”, ha advertido el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, durante la apertura de una cita marcada por las protestas de los jóvenes en todo el mundo por la pasividad de los Estados ante la crisis climática.
“Estamos en un agujero y debemos dejar de cavar”, ha alertado en referencia a unas emisiones que no paran de crecer y que, si no se toman nuevas medidas, Cuando se firmó este pacto, los negociadores de los casi 200 países que lo cerraron en la capital francesa en 2015 ya eran conscientes de que se necesitaban planes más duros. Por eso se establecieron revisiones periódicas al alza de esas contribuciones nacionales, que son voluntarias y establecen metas para 2025 y 2030. La primera revisión es en 2020 y el objetivo de Guterres al convocar esta cita en Nueva York era forzar a los gobernantes a presentar esos planes más ambiciosos.