Podemos avanzar cambiando la gestión
Manuel Quiterio Cedeño
En estos días, en que el Colegio Médico Dominicano crea un discurso crítico hacia la seguridad social para disfrazar su oposición al desarrollo de la Atención Primaria de Salud en los programas públicos y en el Sistema Dominicano de Seguridad Social, que sabiamente promueve la Presidencia de la República, es bueno volver la vista hacia los problemas reales de este importante sector.
Un aspecto sobre el cual considero importante reflexionar es si nuestro país dispone de recursos y condiciones para avanzar y superar nuestros vergonzosos atrasos en salud, o si el principal obstáculo es la gestión del sistema.
Tomo como ejemplo los servicios que ofrece PROFAMILIA que sólo cuenta con 9 pequeñas clínicas de las cuales sólo una de ellas (la de Santiago) ofrece servicios de hospitalización.
Con esta limitada red integrada el año pasado se ofrecieron en promedio 49 servicios cada hora (considerando las 24 horas del día) los 365 días del año. Además, se atendieron 255 mil consultas y procedimientos externos. Esto nos dice que considerando los días laborables y una jornada de 8 horas, el promedio alcanzado fue de 122 consultas y procedimientos cada hora.
También se realizaron 111,434 estudios diagnósticos, un promedio diario de 426.9, e igualmente 328,550 pruebas de laboratorios y banco de sangre, un promedio diario de 1,258.8. En resumen PROFAMILIA ofreció servicios a 163,943 personas en sus siete clínicas, un promedio diario de 628 cada hora.
PROFAMILIA tiene importantes avances en el uso de la Historia Clínica Electrónica de las personas, en la creación de manuales de procedimientos, los protocolos de atención se revisan y actualizan continuamente, en la sensibilización del personal clínico en atención integral y aplica encuestas de satisfacción de usuarios en sus clínicas, para citar sólo algunos. Esto es parte de un sistema de gestión de la calidad.
Esta organización sin fines de lucro tiene un programa de salud comunitaria basado en la estrategia de atención primaria, y dispone para ello de dos unidades móviles que trabajan en barrios y bateyes, donde atendieron 12,400 personas en el 2017. Trabaja con un plan estratégico para un período de 5 años y es reconocida internacionalmente como una entidad modelo en el campo de la salud en América Latina y el Caribe.
Como si esto fuera poco, además gestiona un programa de investigaciones biomédicas y uno de los 7 estudios realizados el año pasado fue auditado por la Organización Mundial de la Salud que incluyó el producto desarrollado en su lista de productos medicinales precertificados.
Otro ejemplo de que la buena gestión de los programas de salud funciona es que mientras la mortalidad infantil general en el país es de 22.2 por mil, en los servicios gestionados por las administradoras de riesgos de salud de asociadas en ADARS (con 2.6 millones de afiliados) es de sólo 8.4 por mil. De estos temas no quiere hablar el CMD.