El turismo salva a la economía española esta década
La industria turística ha sido la providencial salvadora de la economía española durante esta década, que comenzó duramente marcada por la recesión, según puede desprenderse de la Cuenta Satélite del Turismo. Esta operación estadística mide la relevancia económica del turismo a través de indicadores como la aportación de la actividad turística al PIB o al empleo. Y es que según el Instituto Nacional de Estadística (INE), “desde 2010 la evolución en términos reales de la economía turística ha sido mejor que la del conjunto de la economía española”.
Así, y según refleja la Cuenta Satélite difundida por el INE el pasado 18 de diciembre, “el peso del Producto Interior Bruto (PIB) asociado al turismo, medido a través de la demanda final turística, alcanzó los 125.529 millones de euros en el año 2016”.
Esta cifra supuso el 11,2% del PIB, tres décimas más que en 2015. “Este peso ha crecido un punto desde 2010, pasando del 10,2% al 11,2%”, explica el INE.
Además, el nivel de empleo vinculado al turismo también aumentó el año pasado al situarse en 2,56 millones de puestos de trabajo.
“Este nivel representó el 13% del total de los puestos de trabajo de la economía, frente al 12,7% del año anterior. Desde 2010, el incremento ha sido de 1,4 puntos, al pasar del 11,6% al 13%”, recuerda el INE.
Por otra parte, la componente de mayor peso en la demanda final turística en 2016 fue el consumo turístico receptor, con el 49,3% del total. “Este agregado también ha sido el que más ha crecido en los últimos años dentro de la composición de la demanda final turística”, explica el Instituto Nacional de Estadística.
Cabe recordar además que la demanda final asociada al turismo, de 125.529 millones de euros, aumentó un 6,6% respecto al año anterior. Por ello, destaca el INE, “desde 2010 la evolución en términos reales de la economía turística ha sido mejor que la del conjunto de la economía”.
Según informa el INE, “debido al constante crecimiento del turismo receptor y a una alternancia de descensos y crecimientos inferiores del turismo emisor, el saldo entre ambos se ha incrementado en mayor medida que el turismo receptor en todo el periodo analizado”.
