Brasil espera boom Turístico por visita Del Sumo Pontífice
El Gobierno de Brasil prevé que entre 2,5 y 3 millones de personas acudan en julio a Río de Janeiro para participar en la Jornada Mundial de la Juventud, que será la primera
visita al extranjero del papa Francisco, según informó ayer.
El deseo de conocer al primer pontífice latinoamericano elevará el atractivo del encuentro, explicó a Efe el Ministro de Turismo de Brasil, Gastão Vieira.
La anterior edición de la jornada, en Madrid en 2011, congregó a cerca de dos millones de personas, según sus organizadores.
“Aunque podemos esperar un número algo menor de jóvenes extranjeros, con seguridad vamos a tener una presencia masiva de brasileños”, aseveró el ministro.
“Siendo un papa del continente (…) estamos muy seguros de que tendremos mucha más gente de la que esperábamos antes”, indicó.
Las autoridades de Río de Janeiro se preparaban para una asistencia de casi dos millones de personas, pero creen que el papa argentino atraerá a más participantes de América Latina.
Hasta ahora se han inscrito 300 mil extranjeros para la reunión, que tendrá lugar del 23 al 28 de julio en la ciudad carioca, de acuerdo con el Gobierno brasileño.
Vieira dijo que no existe “ninguna preocupación” sobre el alojamiento de los visitantes que llegarán a Río de Janeiro, pese a su previsible aumento, ya que muchos de ellos se quedarán en casas de familias, escuelas, instituciones religiosas y parroquias.
La JMJ de Río de Janeiro tiene como lema: “Andad y haced discípulos a los pueblos”.
Benedicto XVI tenía previsto asistir a la Jornada de este año, a la que siempre ha acudido el Pontífice desde su fundación en 1986 por Juan Pablo II.
El arzobispo de Río de Janeiro, Orani João Tempesta, dijo la semana pasada que desea llevar al papa a una favela y al Cristo del Corcovado.
La primera actividad de Francisco será una misa en la playa de Copacabana el día 25 de julio.
Al día siguiente hablará con los jóvenes tras una representación de la Vía Sacra también en Copacabana y el 27 de julio asistirá a una vigilia en Guaratiba, un suburbio de la zona oeste de la ciudad.