Barceló busca aerolína propia para competir con Orizonia y Globalia

El grupo Barceló está contemplando opciones para dotar de capacidad aérea a la nueva división de turoperación que lanzará el próximo año. De acuerdo con un reporte del madrileño Hosteltur, el proyecto que liderará Gabriel Subías no se quedará en un mediano turoperador de grandes viajes. El objetivo es competir con Travelplan e Iberojet, para lo que necesita compensar la falta de una aerolínea propia.
Los responsables de turoperación de Orizonia y Globalia coinciden en asegurar que no están preocupados por la vuelta de Barceló a la turoperación, si bien reconocen estar expectantes. Tanto en la división de turoperadores que lidera Iberojet (Orionzia) como en Travelplan (Globalia), están atentos para ver cómo soluciona Barceló la cuestión del transporte aéreo, fundamental para un gran turoperador.

Gran turoperador

Según Hosteltur, el proyecto que se plantea el copresidente del grupo, Simón Pedro Barceló, es la puesta en marcha de un potente turoperador, cuyo primer paso será su estreno como mayorista especializada en grandes viajes, que aprovechará el acuerdo de Viajes Barceló con National Geographic.
Pero a partir de enero, una vez liberado Gabriel Subías de la cláusula de Orizonia que le impide trabajar en la competencia, el objetivo será armarse para competir con Travelplan e Iberojet. Es decir, Barceló no se conformará con lanzar un modesto turoperador. En un principio, el nuevo turoperador se dedicará a los grandes viajes y al Caribe, no tocando por el momento islas y Europa.
Un proyecto para el que Barceló necesitará alcanzar sólidos acuerdos con compañías aéreas para lograr cupos competitivos en vuelos regulares, pero especialmente tenderá a los orígenes de la turoperación. Es decir, chartear aviones.

Globalia

Sobre estas dos líneas de actuación, fuentes próximas a las conversaciones dijeron a Hosteltur que Barceló ha estado hablando con los máximos responsables de Air Europa, compañía de Globalia. Aunque pueda parecer contradictorio negociar con la aerolínea del grupo donde está Travelplan, lo cierto es que a la aerolínea de Juan José Hidalgo no le vendría mal asegurarse esas ventas de turoperación.
Por otro lado, y especialmente, también hay acercamiento a Pullmantur, turoperador especializado en cruceros que además tiene cuatro Boeing 747-400 (Jumbos), con capacidad para entre 300 y 500 pasajeros cada uno. Cabe recordar que la compañía propiedad de Royal Caribbean, lanzó al mercado hace medio año a Viajes Nautalia, agencia impulsada y dirigida por José María Lucas, que antes de ser director de Viajes Marsans dirigió Viajes Barceló.
Con esta última opción Barceló lograría, además de chartear plazas aéreas, asegurarse las mejores condiciones y una mayor capacidad de distribución de su futuro producto mayorista a través de Nautalia, aumentando así la que tendrá a través de su propia agencia, Viajes Barceló, si bien la mayor apuesta de distribución será la expansión de esta red propia. Una expansión que lo previsible es que la realice Viajes Barceló sobre todo mediante captación de agencias ya existentes bajo la fórmula de franquicias o asociadas.
Con este movimiento, el grupo Barceló sigue en la línea que inició en 2003 para recuperar su área emisora.

Vuelta a los orígenes

Hace poco más de 10 años el grupo Barceló estaba formado por la cadena hotelera, el turoperador Turavia y la agencia de viajes. Pero en 2000 vendió Turavia y Viajes Barceló a First Choice.
Posteriormente, y ante la incapacidad del grupo británico para comprender la idiosincrasia del mercado emisor español, en 2003 puso en venta las dos empresas. Turavia fue adquirida por Iberostar (y pasó posteriormente a Orizonia, donde recientemente ha sido dada de baja). Por su parte, cuando Marsans estaba a punto de hacerse con Viajes Barceló, el grupo mallorquín ejerció su derecho preferente de recompra, y la agencia volvió a la casa que la vio nacer.
Ahora, con esta apuesta por la turoperación, Barceló vuelve a sus orígenes y se convierte en el tercer grupo turístico español, junto con Orizonia y Globalia, rompiendo la bipolaridad que se había creado tras la desaparición de Marsans.